El presidente colombiano ordena suspender el intercambio de inteligencia con EE. UU. por los ataques a barcos sospechosos de narcotráfico

El presidente de Colombia, Gustavo Petro, condenó los ataques del Ejército de Estados Unidos contra embarcaciones sospechosas de narcotráfico en el Caribe, lo que ahonda la disputa sobre la estrategia de Washington contra el narcotráfico.

Por Aldgra Fredly
12 de noviembre de 2025 11:16 Actualizado: 12 de noviembre de 2025 11:16

El presidente de Colombia, Gustavo Petro, anunció el 11 de noviembre la suspensión del intercambio de inteligencia con Estados Unidos (EE. UU.) en respuesta a los ataques del Ejército de EE. UU. contra embarcaciones sospechosas de narcotráfico en el Caribe.

Petro declaró en X que había ordenado a las fuerzas de seguridad suspender la cooperación con las agencias de EE. UU. hasta que el Ejército de ese país cese los ataques a embarcaciones en el Caribe.

«Esta medida se mantendrá mientras persistan los ataques con misiles contra embarcaciones en el Caribe. La lucha contra el narcotráfico debe subordinarse a los derechos humanos de los caribeños», afirmó.

La Casa Blanca no se ha pronunciado públicamente sobre el anuncio de Petro. The Epoch Times se puso en contacto con la Casa Blanca para obtener una declaración, pero no recibió respuesta antes del cierre de la edición.

Desde septiembre, según publicaciones del secretario de Defensa, Pete Hegseth, y otros informes de prensa, las Fuerzas Armadas de EE. UU. han llevado a cabo al menos 19 ataques contra embarcaciones presuntamente dedicadas al transporte de drogas ilegales hacia ese país, acciones que han suscitado la condena de Venezuela y de Colombia. Según esos informes, al menos 76 presuntos narcotraficantes han muerto en esos ataques.

Las tensiones entre Estados Unidos (EE. UU.) y Colombia aumentaron después de que el presidente estadounidense, Donald Trump, acusara a Gustavo Petro de fomentar la producción ilegal de drogas en el país, imputaciones que Petro y el Gobierno colombiano han negado rotundamente.

En octubre, Trump elevó los aranceles a las importaciones colombianas y suspendió pagos y subsidios estadounidenses al país, lo que llevó a Petro a llamar a consultas al embajador de Colombia en EE. UU.

En septiembre, el Gobierno de Trump incluyó a Colombia en la lista de países que, según Washington, no cooperan en la lucha contra el narcotráfico. En una determinación presidencial, Trump afirmó que el cultivo de coca y la producción de cocaína en Colombia habían alcanzado niveles récord durante el mandato de Petro.

Trump elogió a las agencias de seguridad y a las autoridades municipales de Colombia por sus esfuerzos para hacer frente a los grupos «terroristas y criminales», pero señaló que el Gobierno colombiano no ha cumplido con sus obligaciones en materia de control de drogas.

«Consideraré cambiar esta designación si el Gobierno de Colombia adopta medidas más enérgicas para la erradicación de los cultivos de coca y la reducción de la producción y del tráfico de cocaína, así como para exigir responsabilidades a quienes producen, trafican y se benefician de la producción de cocaína, incluso mediante una mayor cooperación con Estados Unidos para llevar ante la justicia a los líderes de las organizaciones criminales colombianas», declaró.

Petro criticó la decisión del Gobierno de Trump del 15 de septiembre, al señalar que Colombia estaba siendo penalizada a pesar de haber perdido decenas de policías, soldados y ciudadanos en operaciones para evitar la llegada de cocaína a Estados Unidos.

Colombia figuró por última vez en la lista en 1997, cuatro años después de la muerte del conocido líder del cartel de Medellín, Pablo Escobar.

Chris Summers contribuyó a este informe.

Artículo publicado originalmente en The Epoch Times con el título «Colombian President Orders Halt to Intelligence Sharing With US Over Drug Boat Strikes»

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