La IA intensifica la ola de destrucción de empleo: lo que debe saber

Un análisis afirma que los puestos de analista y gerente de cuello blanco son los más expuestos ante la IA, mientras que los trabajos manuales corren riesgo debido a la robotización

Por Panos Mourdoukoutas
10 de noviembre de 2025 13:05 Actualizado: 10 de noviembre de 2025 19:50

Varias multinacionales han anunciado recientemente una oleada de despidos que implican la supresión de decenas de miles de empleos. La mayoría ha justificado estas decisiones, en parte, por la integración de la inteligencia artificial (IA) y la automatización.

Los expertos señalan que, si bien una parte importante de los puestos sigue siendo difícil de replicar mecánicamente, es probable que la IA asuma las funciones analíticas y de oficina, mientras que la robótica sustituirá muchas tareas manuales.

Amazon anunció el 28 de octubre que suprimirá cerca de 14 000 puestos de personal cualificado para mantener su «agilidad».

Por su parte, UPS (empresa de mensajería) informó de que había suprimido 34 000 puestos operativos en los primeros nueve meses del año —una reducción muy superior a los 20 000 despidos anunciados en abril— como parte de su iniciativa Efficiency reimagined («eficiencia reinventada»).

Nestlé anunció el 16 de octubre que reducirá su plantilla mundial en 16 000 puestos en un plazo de dos años, alegando la necesidad de mejorar la eficiencia operativa mediante servicios compartidos y la automatización de procesos.

En agosto, Marc Benioff, CEO de Salesforce, reveló en un pódcast que la empresa había sustituido a unos 4000 agentes de atención al cliente por sistemas de IA.

Tradicionalmente, las empresas recortan personal durante las recesiones económicas. Esta serie de despidos, sin embargo, se produce en una fase de alta rentabilidad y apunta a un cambio de fondo: la transformación del propio concepto de trabajo, impulsada por la rápida expansión de la IA.

A diferencia de las anteriores oleadas de automatización, que imitaban funciones corporales y sustituían sobre todo tareas manuales o rutinarias, la IA asume cada vez más tareas que exigen capacidades cognitivas humanas. Ya no se limita a ejecutar de manera automática tareas repetitivas: aprende, analiza y decide.

Estos dos cambios —la automatización manual y la automatización cognitiva— están reconfigurando el mercado laboral, tanto en los puestos cualificados como en los no cualificados. Algunos empleos se redefinen, otros desaparecen.

En un comunicado sobre los recortes de personal, Amazon sostiene que el poder transformador de la IA exige nuevas estructuras organizativas: «Permite a las empresas innovar mucho más rápido que nunca. «Creemos necesaria una organización más ágil, con menos niveles jerárquicos y más responsabilidad, para atender con la mayor flexibilidad posible a nuestros clientes y socios». Sin embargo, Andy Jassy, ​​CEO de Amazon, aclaró durante la presentación de resultados del 30 de octubre que estos despidos recientemente anunciados «no se deben realmente a la IA, al menos no todavía».

La expansión de la IA en el ámbito laboral

Economistas, bancos centrales e institutos de investigación coinciden en que la IA avanza con rapidez en el ámbito profesional.

Un informe del Banco de la Reserva Federal de San Luis señalaba que, a principios de 2023, la IA generativa —la categoría capaz de crear contenido nuevo— se había generalizado en los entornos laborales de Estados Unidos. Herramientas como ChatGPT están ahora integradas en navegadores, programas de ofimática y motores de búsqueda, lo que democratiza el uso de grandes modelos de lenguaje entre millones de empleados.

El banco observó que los puestos que adoptan la IA generativa de forma intensiva —en particular en los ámbitos de la informática y las matemáticas— registraron los mayores aumentos del desempleo.

«Nuestros hallazgos sugieren que podríamos estar presenciando los inicios de un desplazamiento del empleo impulsado por la IA», señala el informe. «A diferencia de las revoluciones tecnológicas anteriores, que afectaron principalmente a la industria o a las tareas administrativas, la IA generativa se centra en las habilidades cognitivas de los trabajadores del conocimiento, un colectivo que antes se consideraba más estable».

Un informe de la Brookings Institution estima que el 30 % de los trabajadores estadounidenses podrían ver alterada al menos la mitad de sus tareas laborales por la IA generativa. Mientras que las anteriores oleadas de automatización afectaron principalmente a los trabajadores manuales, se espera que la IA incida en una amplia gama de empleos denominados «cognitivos y no rutinarios», especialmente entre las clases media y alta.

En la misma línea, el McKinsey Global Institute ha proyectado que hasta 54 millones de trabajadores estadounidenses podrían verse afectados por la automatización resultante de la combinación de IA y robótica para 2030.

Por su parte, un análisis de Goldman Sachs prevé que la adopción generalizada de la IA podría traducirse en la eliminación de entre el 6 % y el 7 % de los empleos en Estados Unidos, lo que representa varios millones de puestos de trabajo.

Los economistas de Goldman Sachs estiman que cada punto porcentual de aumento en la productividad derivado de tecnologías ahorradoras de mano de obra incrementa temporalmente el desempleo en aproximadamente 0,3 puntos.

Los empleos más vulnerables

Un estudio de la Sociedad para la Gestión de Recursos Humanos (SHRM, por sus siglas en inglés), publicado el 25 de abril, ofrece un análisis detallado de los puestos de trabajo más expuestos a la IA en el mercado laboral estadounidense.

Según este informe, el 12,6 % de los empleos —aproximadamente 19,2 millones de puestos— presenta un riesgo alto o muy alto de automatización. En concreto, el 14 % del trabajo manual, el 12,3 % de los puestos de oficina y el 12,1 % del sector servicios se consideran altamente vulnerables.

Paralelamente, un informe de Upwork, publicado el 9 de junio, identifica 120 profesiones difíciles de sustituir por la IA, especialmente en el sector sanitario, los ámbitos creativos y los campos técnicos altamente especializados.

La IA y la transformación de las competencias

Un estudio publicado por la Escuela de Negocios de Harvard en diciembre de 2024 concluye que la IA ejerce un impacto ambivalente sobre la demanda laboral.

En los puestos más expuestos a la automatización, la IA reduce la necesidad de especialización y facilita la realización de tareas complejas. Por el contrario, en los empleos que se benefician de estas herramientas, impulsa la productividad y eleva la demanda de competencias avanzadas y complementarias.

«A medida que avanza la IA generativa, resulta esencial comprender la diversidad de sus efectos en el empleo», subrayan los autores. «Corresponde a los responsables políticos, tanto del sector público como del privado, reconocer esta doble dinámica —automatización y puesta en valor de las competencias— para que los empleados puedan adaptarse y prosperar en este nuevo entorno».

Mientras tanto, una investigación del premio Nobel de Economía Daron Acemoglu y sus colegas, publicada en la revista Journal of Labor Economics, indica que las empresas que adoptan la IA reducen la contratación para puestos no técnicos, al tiempo que ajustan las cualificaciones exigidas para los puestos restantes.

Andy Zenkevich, fundador y consejero delegado de la agencia digital Epiic, experta en la optimización para motores de IA, declaró a The Epoch Times que considera exagerado el temor a una pérdida masiva de empleos ligada a esta tecnología.

«Entre las empresas con las que colaboramos en marketing digital —incluidos gigantes tecnológicos—, las oleadas de despidos no son la norma», explica. «Al contrario, las funciones están evolucionando: un redactor junior se convierte en un «editor de contenido de IA», responsable del diseño de instrucciones, de la verificación de la información y de la corrección de estilo».

Según él, solo alrededor del 2,5 % de los empleos se verían realmente amenazados por la implantación generalizada de la IA. «La automatización completa se revela mucho más difícil de lo que sugieren los titulares».

«Más de un tercio de los empleos requiere hoy competencias híbridas, en la intersección entre la tecnología y las cualidades humanas que las máquinas no pueden replicar», continúa Zenkevich. También Georgios Koimisis, profesor asociado de finanzas en la Universidad de Manhattan, comparte este escepticismo.

«La creciente preocupación por la IA proviene más de su simbolismo que de su realidad», argumenta en nuestras páginas. «Los despidos no dependen únicamente de la IA, sino también del deseo de las empresas de parecer innovadoras. Afirmar una transformación mediante la IA tranquiliza a los inversores y sugiere que los líderes tienen una dirección clara».

Según Koimisis, algunos planes de reestructuración presentados como impulsados por la IA tienen menos que ver con la adaptación al progreso que con enviar señales de austeridad a los accionistas.

«La IA no solo está transformando la organización del trabajo, sino también el propio concepto de valor», concluye.

Izhar Haq, director de la Escuela de Contabilidad Profesional de la Universidad de Long Island, ofrece una perspectiva más matizada y subraya que la desaceleración económica y las circunstancias actuales también influyen.

Considera que, si bien los efectos a largo plazo de la IA siguen siendo inciertos, «los puestos analíticos de oficina son los más amenazados por esta tecnología, mientras que los empleos manuales se enfrentan a la competencia de la robótica».

Artículo publicado originalmente en The Epoch Times Francia con el título «L’IA amplifie la vague de suppressions d’emplois — Ce qu’il faut savoir»

Cómo puede ayudarnos a seguir informando

¿Por qué necesitamos su ayuda para financiar nuestra cobertura informativa en España y en todo el mundo? Porque somos una organización de noticias independiente, libre de la influencia de cualquier gobierno, corporación o partido político. Desde el día que empezamos, hemos enfrentado presiones para silenciarnos, sobre todo del Partido Comunista Chino. Pero no nos doblegaremos. Dependemos de su generosa contribución para seguir ejerciendo un periodismo tradicional. Juntos, podemos seguir difundiendo la verdad.