Vigo acoge la polémica muestra de cadáveres humanos cuyo origen sigue sin aclararse

Por Anastasia Gubin
8 de octubre de 2025 07:59 Actualizado: 8 de octubre de 2025 07:59

La exposición de cuerpos plastinados Bodies Evolution —que exhibe cadáveres humanos reales y cuya procedencia ha suscitado una amplia controversia— ha recalado en el Palacio de Congresos de Vigo y ya prepara su próxima cita en La Coruña. Estas muestras itinerantes, que se presentan bajo distintos nombres (Real Bodies, Body Worlds, Our Body), generan inquietud entre colectivos y autoridades, que advierten de la falta de documentación que acredite el origen de los cuerpos, denuncian la mercantilización del cuerpo humano y recuerdan que los restos merecen un trato de especial dignidad y respeto.

Según la página web www.bodiesevolution.es —en cuyo registro figura como propietario Rascid Baifraouri, de Las Palmas de Gran Canaria—, la muestra de Vigo incluye ocho cuerpos reales y más de 100 órganos humanos que han sido cuidadosamente conservados mediante plastinación.

La plastinación es un procedimiento que, en un plazo relativamente corto tras la muerte, sustituye los fluidos y las grasas por polímeros como la silicona o las resinas epoxi para preservar la anatomía y la forma, lo que permite exhibir órganos y cuerpos con gran detalle.

La principal suministradora de los cuerpos humanos plastinados presentados en las exposiciones Bodies es la compañía Dalian Hoffen Bio-Tecnology Co., Ltd., fundada en 2004 y con sede en la ciudad de Dalian, en la provincia nororiental china de Liaoning, según informa la Organización Mundial para Investigar la Persecución de Falun Gong en China (WOIPFG, por sus siglas en inglés). WOIPFG investiga la posibilidad de que algunos cuerpos de la muestra correspondan a practicantes de Falun Gong perseguidos, ejecutados y desaparecidos por el régimen chino.

Falun Gong —también llamada Falun Dafa— es una disciplina espiritual y de ejercicios basada en los principios de Verdad, Benevolencia y Tolerancia, que desde 1999 es objeto de persecución por parte del régimen chino.

Las empresas organizadoras —en particular Real Bodies— confirman que los cuerpos provienen de la compañía de Dalian, sosteniendo que se trata de «cuerpos no reclamados, donados por las autoridades a universidades médicas chinas», según un documento promocional.

«Un cuerpo no reclamado es una persona fallecida cuyos restos no han sido reclamado por ningún familiar o cuyos allegados no pueden ser localizados dentro de un período de tiempo establecido por las autoridades pertinentes», añade Real Bodies. También dice que en China hay un plazo de unos 30 días para declarar un cuerpo no reclamado, y hasta tres meses para autorizar cesiones o donaciones.

Sin embargo, el proceso de plastinación de cuerpos humanos requiere cadáveres frescos sin conservantes, dice WOIPFG. En un extenso informe la organización descarta la versión de que los cuerpos procedan de fallecidos «no reclamados», ya que para mantenerlos durante 30 días se suelen conservar en formalina.

Los principales proveedores de cadáveres frescos para plastinación son la seguridad pública, la fiscalía y los tribunales, controlados por el Comité de Asuntos Políticos y Legales (PLAC), que también lideran la persecución de Falun Gong.

El informe cita una declaración atribuida al gerente general de Dalian Hoffen y director del Departamento de Anatomía de la Universidad de Medicina de Dalian, Sui Hongjin, en la que —según la WOIPFG— admitió que algunos «cadáveres» usados en exposiciones Bodies procedían de la Oficina de Seguridad Pública y contaban con el apoyo de «funcionarios del gobierno en distintos niveles».

La organización también subraya que la venta y exhibición de cuerpos plastinados generan importantes beneficios económicos y asegura que el Estado chino ha desarrollado un negocio de plastinación a gran escala.


Lea también: Museos en España retiran momias y restos humanos para cumplir tratamiento ético 


Por su parte, España ha ratificado el Convenio de Oviedo (1999), un instrumento que consagra la dignidad humana, exige el consentimiento informado y prohíbe el lucro con el cuerpo humano y sus partes.

«Debemos recordar que esta exposición está dedicada expresamente a los niños y jóvenes que acudirán a verla con sus centros escolares. ¿Qué efecto produce la cosificación del ser humano en sus mentes?», declaró a The Epoch Times España Montserrat Masvidal, presidenta de Por la Dignidad Humana, una organización centrada en dar a conocer al público la verdad que se esconde detrás de las exposiciones de cuerpos plastinados de origen chino.

«Me gustaría incidir en la ilegalidad de esta exposición, indicando que el Capítulo 7 del Convenio de Oviedo, titulado «Prohibicción del lucro y utilización de una parte del cuerpo humano», dice Masvidal, añadiendo lo expresado en el artículo 21, «dice concretamente que «el cuerpo humano y sus partes, en cuanto tales, no deberán ser objeto de lucro».

Montserrat Masvidal señala que «la propia organización de las exposiciones presume de la gran cifra de visitantes que recibe en todo el mundo, y todos pagan su entrada. Debemos ser conscientes de que esta muestra, que se ampara en el nombre de la ciencia, se ha convertido en un negocio millonario».

Las entradas en Vigo cuestan entre 10 y 12 euros. Alrededor de 100 000 visitantes significan al menos un millón de euros. La página de Bodies Evolution dice que la muestra ha sido visitada por cientos de miles de personas. Otras muestras cobran más de 30 euros por entrada.

Bodies Evolution tampoco parece ajustarse a los requisitos de la «Carta de compromiso para el tratamiento ético de restos humanos» suscrita por los museos dependientes del Ministerio de Cultura, que prohíbe que estos restos «constituyan objeto de talleres o actividades públicas» y establece que, para eventos educativos, «deben utilizarse moldes o réplicas», además de tener en cuenta las declaraciones, intereses, prácticas y creencias de la comunidad o grupo étnico o religioso de origen.

En febrero, los 16 museos estatales adscritos y gestionados por la Dirección General de Patrimonio Cultural y Bellas Artes dieron ejemplo de responsabilidad ética y comenzaron a retirar muestras reales.

El compromiso del Gobierno de España sobre el trato de restos humanos indica que «su estatus dentro de las colecciones es único, ya que no son simples bienes culturales; son los restos de una persona fallecida y deben ser tratados con dignidad y respeto», dice Masvidal.

«Tenemos que reflexionar sobre el texto y darnos cuenta de que, cuando vamos a visitar la exposición de restos plastinados, debemos preguntarnos si las posiciones en que se exhiben esos cuerpos son respetuosas y dignas, o si solo responden a la curiosidad y morbosidad del público».

«La humanidad no puede ni debe ignorar tales hechos. ¿A quién le gustaría ver a su padre o a un familiar fallecido en una exposición de este tipo? Desde la prehistoria, el ser humano muestra respeto por la muerte y tiene sus rituales. ¿Cómo puede ser que todo esto se haya olvidado? Es preciso que la humanidad reflexione: ¿en qué nos hemos convertido? ¿Qué estamos haciendo? ¿Hacia dónde vamos?».


Lea también: «Bodies» llega a Málaga entre denuncias por, presuntamente, usar cuerpos de ejecutados en China sin consentimiento


Un tribunal de Francia cerró la muestra

La explicación de que los cuerpos de las muestras proceden de personas muertas no reclamadas no bastó a la justicia francesa.

En 2009, Louis-Marie Raingeard de La Blétière, juez de medidas cautelares del Tribunal Superior de París, ordenó a la empresa Encore Events, que organizaba la exposición Our Body / À corps ouvert a cerrar en el plazo de 24 horas la exhibición de cadáveres y piezas anatómicas de origen chino, bajo pena de 20 000 euros por día de retraso, informó Le Monde. El juez exigió que un agente judicial elaborara la lista de los sujetos exhibidos dentro del mismo plazo y que los incautara para poder presentarlos a las autoridades francesas competentes, a petición de estas, bajo pena de 50 000 euros por cada infracción detectada.

«El respeto debido a los cuerpos humanos no cesa con la muerte. Los restos de las personas fallecidas […] deben ser tratados con respeto, dignidad y decencia», dijo la corte, según Affaires Juridiques.

El Tribunal de Apelación centró su decisión en el origen de los cadáveres y en la falta de consentimiento, señalando que, para autorizar la exhibición de cuerpos reales, es imprescindible demostrar que fueron obtenidos de forma legal y con el consentimiento previo de las personas en vida.

«Las asociaciones que pidieron la prohibición presentaron documentos que sembraron dudas razonables sobre el origen y el consentimiento; el organizador de la muestra no pudo aportar pruebas que despejaran esas dudas, por lo que el tribunal consideró justificada la medida».

El tribunal añadió que para fines científicos o educativos, la clave para obtener una autorización especial sigue siendo la trazabilidad y el consentimiento.

Cómo puede usted ayudarnos a seguir informando

¿Por qué necesitamos su ayuda para financiar nuestra cobertura informativa en España y en todo el mundo? Porque somos una organización de noticias independiente, libre de la influencia de cualquier gobierno, corporación o partido político. Desde el día que empezamos, hemos enfrentado presiones para silenciarnos, sobre todo del Partido Comunista Chino. Pero no nos doblegaremos. Dependemos de su generosa contribución para seguir ejerciendo un periodismo tradicional. Juntos, podemos seguir difundiendo la verdad.