Después de que los miembros de la Organización Mundial de la Salud (OMS) aprobaran el pasado martes el tratado sobre pandemias, el Gobierno federal alemán ha prometido otros diez millones de euros en ayudas. Así lo anunció la ministra federal de Sanidad, Nina Warken (CDU), tras una reunión con el director general Tedros Adhanom Ghebreyesus, según informaron las agencias.
Según estas informaciones, la ministra afirmó que la aprobación del tratado internacional contra las pandemias demuestra de lo que son capaces los Estados miembros de la OMS. «Proteger la salud de las personas en todo el mundo mediante una mejor cooperación: algo que casi nadie habría creído posible tras la retirada de Estados Unidos de la OMS». Por eso es aún más importante que la OMS impulse su proceso de reforma y se centre en sus tareas fundamentales.
El Gobierno de España por su parte, aprobó el mismo martes 20 de mayo una contribución de 5 250 000 euros a la OMS y otra de 2 810 000 euros a la Organización Panamérica de la Salud (OPS).
Moncloa justificó estas aportaciones «por la necesidad de cumplir los objetivos y prioridades contenidos en el vigente VI Plan Director de la Cooperación Española 2024-2027 y por la cancelación de determinadas contribuciones de Estados Unidos a ciertos organismos, entre los que se encuentra la OMS y, dentro de ésta, la OPS», según la web oficial del Gobierno.
Más de 400 000 firmas contra el acuerdo
Sin embargo, también hay voces que valoran negativamente lo acordado el martes en Ginebra. Entre ellas se encuentra la organización no gubernamental (ONG) CitizenGo, que se muestra muy crítica con el acuerdo sobre pandemias. Hasta el martes, más de 400 000 personas habían firmado una petición en la que se pedía a los delegados alemanes que no aprobaran el acuerdo.
Sebastian Lukomski, director de campaña de CitizenGo, afirma en un boletín informativo que el acuerdo se ha alcanzado «sin transparencia y sin calendario». En una reunión de la comisión celebrada el martes por la noche, en la que se allanó el camino para la votación del día siguiente, solo estuvieron representados 124 de los 195 países.
Además, se anunció que el tratado está listo, aunque aún no lo está. Lukomski se refiere al tema de la transferencia de la tecnología «Sistema de acceso a los agentes patógenos y distribución de los beneficios» (PABS por sus siglas en ingles). Los países no han podido ponerse de acuerdo al respecto, por lo que será necesario renegociar. Así lo ha informado también el diario austriaco «Standard».
Según Lukomski, la decisión al respecto se ha aplazado hasta 2026. «En lugar de posponer todo el acuerdo una vez más, la OMS ha aprobado a toda prisa medio acuerdo y ha proclamado la victoria», afirma. Tras más de tres años de debates, la organización tenía que presentar algo, opina Lukomski. También se refirió a los problemas financieros tras la salida de Estados Unidos, hasta ahora el mayor contribuyente.
El crítico de la OMS Roguski ve una división del acuerdo
El periodista estadounidense y crítico con la OMS James Roguski escribe en su Substack sobre una división del acuerdo sobre pandemias, ya que la compensación de beneficios del Programa de Apoyo de Beneficio Social (PABS) ha sido excluida y añadida como anexo. Por lo tanto, el acuerdo sobre pandemias no está cerrado. Acusa a la OMS de «reinterpretar teatralmente su fracaso» para que la aprobación del martes «pareciera un éxito».
Esta división del acuerdo sobre pandemias es un «paso muy inusual» según el derecho internacional. Ahora deben continuar las negociaciones sobre el PABS. Dado que el anexo se considera parte integrante del acuerdo sobre pandemias, los Estados solo podrán firmarlo una vez concluidas las negociaciones sobre el PABS y tras su aprobación en la próxima Asamblea Mundial de la Salud. Esta está prevista para mayo de 2026.
La Alianza de Acción por una Suiza Libre (ABF Schweiz) ve incluso una nueva violación de la propia Constitución de la OMS. El artículo 19 establece que para la adopción de tratados o acuerdos se requiere una mayoría de dos tercios de la Asamblea. Esto presupone la determinación del quórum de los países con derecho a voto.
Eslovaquia fue el único país que denunció el incumplimiento de las normas y solicitó una votación formal, pero sin éxito. Después de que el comité aprobara el tratado el lunes por la noche con 124 votos a favor, 11 abstenciones y 46 Estados miembros ausentes, la aprobación se produjo al día siguiente en la Asamblea General «por consenso». La alianza señaló además que la OMS había procedido de la misma manera en la votación del Reglamento Sanitario Internacional (RSI).
Falta dinero a pesar del posible aumento de las contribuciones obligatorias
Alemania ya apoyó a la OMS en los años 2024/25 con 323 millones de euros. A principios de abril, Berlín puso a disposición dos millones de euros adicionales. Esto convierte a Alemania en uno de los principales donantes de la organización.
Poco después de asumir el cargo en enero, el presidente estadounidense Donald Trump ordenó la retirada de Estados Unidos de la OMS. Estados Unidos, que era el mayor contribuyente, ya ha dejado de transferir fondos. Esto está llevando a la OMS a números rojos, según explicó Tedros a finales de abril. Por lo tanto, la organización se verá obligada a reducir sus actividades y recortar personal. El secretario general anunció que el equipo directivo se reducirá de once a seis miembros.
La OMS espera que otros Estados miembros compensen parcialmente la pérdida de los fondos estadounidenses. La próxima semana se votará un aumento del 20 % de las contribuciones obligatorias para el ejercicio presupuestario 2026/2027.
Incluso si se aprueba, el presupuesto futuro tendría un déficit de 1700 millones de dólares (1500 millones de euros). La OMS ya tenía previsto recortar su presupuesto, inicialmente fijado en 5300 millones de dólares (4675 millones de euros), en un 21 %, hasta los 4200 millones de dólares (3750 millones de euros).
Kennedy pide la salida de la OMS
El secretario de Salud de EE. UU., Robert F. Kennedy Jr., pidió a los países de la OMS en un mensaje de vídeo que siguieran el ejemplo de EE. UU. «La OMS está atrapada en una burocracia inflada, paradigmas arraigados, conflictos de intereses y política de poder internacional», afirmó Kennedy.
Por el contrario, EE. UU. aboga por la cooperación internacional en el ámbito de la salud, libre «de la camisa de fuerza de la injerencia política por parte de influencias destructivas». Según él, la OMS se deja guiar con demasiada frecuencia por los «intereses de la industria médica».
Kennedy propuso crear nuevas organizaciones o reformar las existentes: se necesitan instituciones ágiles, eficientes, transparentes y responsables.
La influencia de China en la OMS
También criticó expresamente la «influencia inadecuada» de China en la OMS. Según él, la organización —a instancias de China— ocultó informes sobre la transmisión del coronavirus entre humanos y, en su lugar, difundió junto con Pekín la «ficción» de que el agente patógeno procedía «más bien de murciélagos o pangolines que de la investigación financiada por el Estado chino en un laboratorio biológico de Wuhan».
La cuestión del origen del virus sigue sin estar clara a día de hoy. El Gobierno chino dificultó la investigación al bloquear las investigaciones de la OMS.
Berlín acogió con satisfacción el tratado sobre pandemias
Alemania y la UE, por su parte, acogieron con satisfacción el tratado sobre pandemias como un paso importante para la cooperación internacional. La comunidad internacional envía así «una señal importante de solidaridad y multilateralismo, y contra la tendencia a actuar por cuenta propia, que al final perjudica a todos», declaró la ministra federal de Desarrollo, Reem Alabali-Radovan (SPD), en el servicio online X.
El presidente Sánchez por su parte celebró el tratado de pandemias como «un acuerdo histórico para proteger la salud global, reforzar el multilateralismo y, sobre todo, para salvar vidas» en una publicación de X.
Desde el punto de vista de la UE, el acuerdo es «un paso decisivo hacia un enfoque global más eficaz y cooperativo» para combatir la pandemia. La UE «seguirá desempeñando un papel pionero en el ámbito de la salud mundial», aseguró el comisario de Salud de la UE, Oliver Varhelyi.
La 78.ª Asamblea Mundial de la Salud comenzó el lunes en Ginebra y durará algo más de una semana.
Artículo publicado originalmente en The Epoch Times Alemania con el título «Pandemievertrag: War die Abstimmung ein Verstoß gegen die WHO-Verfassung?».
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