«La situación es extremadamente grave»: la portavoz del SUP sobre los policías nacionales obligados a pagar por trabajar

En diálogo con The Epoch Times España, la portavoz del Sindicato Unificado de Policía, Nadia Pajarón, analiza las causas y consecuencias de la falta de anticipos para agentes desplazados

Por Miguel Díaz
20 de junio de 2025 17:42 Actualizado: 20 de junio de 2025 17:42

Entrevista:

La Policía Nacional atraviesa una crisis silenciosa pero estructural que amenaza con socavar tanto la operatividad de sus dispositivos como la moral de sus agentes.

Según denunció el Sindicato Unificado de Policía (SUP), las llamadas «cajas pagadoras», destinadas a adelantar dietas para agentes en comisión de servicio, se encuentran bajo mínimos en numerosos puntos del país. Esto está obligando a miles de policías a costear con dinero de su propio bolsillo el alojamiento y la manutención mientras cumplen misiones oficiales lejos de sus domicilios.

El problema ha ganado visibilidad en los últimos días gracias a una campaña impulsada por el SUP y respaldada por numerosos agentes, muchos de los cuales han acudido a las redes sociales para compartir su indignación. «Estamos poniendo dinero de nuestros bolsillos para ir a trabajar», denunció el sindicato en un comunicado difundido el jueves. La situación ha despertado preocupación incluso entre mandos policiales, ya que podría comprometer operativos clave durante el verano.

El SUP, que representa a unos 20 000 afiliados y es el sindicato mayoritario dentro del cuerpo, sostiene que el problema no es solo económico, sino estructural y político.

Este viernes, tras la creciente presión del sindicato y la cobertura mediática, el SUP anunció que el Ministerio del Interior ha liberado una primera partida presupuestaria para cubrir los anticipos vinculados a la cumbre de la ONU que se celebrará en Sevilla en los próximos días. «A lo largo de la semana que viene se procederá con otra partida para hacer frente a los gastos de las cajas pagadoras», comunicó el sindicato a través de sus redes. Si bien se trata de un alivio parcial, la organización insiste en que el problema de fondo sigue sin resolverse.

En este contexto, The Epoch Times España conversó con Nadia Pajarón, portavoz nacional del SUP, para profundizar en una situación que no solo revela fallas administrativas, sino también una posible desatención institucional hacia uno de los cuerpos más esenciales del Estado.

The Epoch Times: ¿Podría explicarnos cómo afecta en la práctica esta falta de fondos a los policías nacionales que deben desplazarse por servicio?

Sra. Pajarón: En el ámbito de la Policía Nacional, es frecuente que determinadas unidades —como Seguridad Ciudadana, Policía Judicial, Extranjería, entre otras— deban desplazarse temporalmente a localidades distintas de aquella en la que residen habitualmente con sus familias.

Esta situación se encuentra regulada en el Real Decreto 462/2002, que establece que cuando un funcionario debe realizar un desplazamiento por comisión de servicio a otra localidad, tiene derecho a percibir una dieta. Esta dieta es una cantidad económica diaria destinada a cubrir los gastos derivados de la estancia fuera de su residencia oficial, como son el alojamiento y la manutención, sin actualizar desde hace 23 años.

Asimismo, el artículo 19 del citado Real Decreto reconoce el derecho del funcionario a solicitar un anticipo del importe estimado de dicha dieta, con el fin de que no deba adelantar con recursos propios los gastos ocasionados por el desplazamiento.

Con las cajas pagadoras bajo mínimos se pretende que un policía se vaya a trabajar fuera de casa pagándose la comida y el hotel de su propio bolsillo. Inaceptable.

No obstante, históricamente han existido dificultades para acceder a estos anticipos, los cuales habitualmente cubrían solo alrededor del 80 % del coste total. A pesar de ello, gracias al compromiso, la vocación de servicio y la profesionalidad de los agentes de esta institución, esta circunstancia nunca ha supuesto un impedimento para la correcta ejecución de los operativos de seguridad o investigación encomendados.

Nadia Pajarón, vocera del Sindicato Unificado de Policía (SUP) de España. (Gentileza Nadia Pajarón)

The Epoch Times: ¿Desde cuándo están vacías las cajas pagadoras y en qué momento el SUP decide que la situación ya es insostenible?

Sra. Pajarón: Al igual que ocurre en muchas empresas privadas, en las Jefaturas Superiores de Policía suele existir una caja de caudales destinada a cubrir pequeños gastos imprevistos o reparaciones internas. En el caso de la Policía Nacional, una parte significativa de esos fondos se emplea habitualmente para adelantar las dietas a los agentes que deben desplazarse en comisión de servicio para participar en operativos específicos.

Sin embargo, en fechas recientes, hemos recibido múltiples llamadas de afiliados que nos trasladan una preocupación creciente: desde sus respectivas secretarías se les ha informado de que no es posible tramitar el anticipo correspondiente a dichas dietas. Lo que en principio podría parecer un incidente aislado ha tomado una dimensión mucho más preocupante al constatar que esta misma queja se repite desde distintos puntos del país a lo largo del día. Esto evidencia que no se trata de un problema puntual o local, sino de una situación generalizada que consideramos extremadamente grave.

The Epoch Times: ¿Tienen conocimiento de si esta es la primera vez que ocurre algo así en la Policía Nacional?

Sra. Pajarón: La Policía Nacional cuenta con más de dos siglos de historia, pero habría que retroceder muchos años para encontrar una situación tan inusual como la actual: a las puertas del periodo estival —y sin haber comenzado aún los meses de mayor carga operativa del verano— no existe presupuesto disponible para anticipar las dietas a los agentes desplazados en comisión de servicios.

Esto está obligando a los policías a asumir el 100 % de los gastos del desplazamiento de su propio bolsillo, en operativos que pueden prolongarse hasta 10 días. Tal y como se ha mencionado anteriormente, en otras ocasiones puntuales el funcionario ha debido adelantar una parte mínima del coste, ya que desde la Dirección General de la Policía se procuraba abonar el resto durante el desarrollo de la comisión, de forma que la dieta se completara en su totalidad.

La situación actual, sin embargo, rompe ese equilibrio y traslada toda la carga económica al trabajador, lo cual resulta inaceptable en una institución del Estado con la responsabilidad operativa que conlleva la labor policial.

The Epoch Times: ¿A qué atribuyen esta situación desde el SUP? ¿Se trata simplemente de una cuestión presupuestaria por la prórroga de los Presupuestos Generales del Estado, o creen que hay otros factores en juego, como una falta de voluntad política o una baja prioridad del área de seguridad para el actual Gobierno?

Sra. Pajarón: No disponemos de información oficial y contrastada sobre el origen concreto del problema actual, aunque sí podemos afirmar con certeza que los Presupuestos Generales del Estado llevan años prorrogados, y hasta ahora esta situación no se había producido. Por tanto, no puede atribuirse directamente a dicha prórroga. La actual falta de liquidez en las cajas pagadoras parece responder a otras causas, cuya explicación corresponde al Ministerio de Hacienda y al Ministerio del Interior, que son quienes disponen de los datos exactos.

No obstante, el problema va más allá del momento presente; es estructural y arrastra lustros de desatención. A día de hoy, la dieta diaria que percibe un agente de la escala básica de la Policía Nacional asciende a 77,13 euros, desglosados en 48,92 euros para alojamiento y 28,21 euros para manutención. Estas cantidades son claramente insuficientes, especialmente si se considera la dificultad de encontrar alojamiento digno en cualquier ciudad de España en vísperas del verano, y mucho menos cubrir tres comidas al día.

Este desajuste no debería sorprendernos si tenemos en cuenta que estas cuantías se establecieron en el año 2002, y desde entonces el IPC ha subido más de un 60 %, sin que ningún gobierno haya impulsado su actualización.

Claro que es falta de voluntad política para abordar un problema que se arrastra desde hace demasiado tiempo. Solucionarlo sería perfectamente viable: actualizar las dietas conforme al coste real de vida y habilitar partidas específicas para garantizar los anticipos. Porque fondos hay –como han evidenciado recientemente diversos medios de comunicación al informar sobre determinados gastos realizados por responsables políticos del Gobierno– lo que falta es la decisión de invertirlos en quienes garantizan la seguridad de todos los ciudadanos.

Foto: Policía Nacional a través de X.

The Epoch Times: ¿Han recibido alguna respuesta oficial del Ministerio del Interior o del Ministerio de Hacienda desde que elevaron el reclamo a los grupos parlamentarios? ¿Saben dónde está bloqueado el dinero?

Sra. Pajarón: Desde el SUP se han realizado gestiones y consultas ante distintos estamentos competentes, sin que hasta el momento se haya obtenido una respuesta clara o concreta que explique por qué no se ha liberado ninguna partida presupuestaria destinada a resolver el problema planteado.

(N. de la R. La entrevista con la Sra. Pajarón se realizó el 19 de junio, un día antes de que el SUP comunicara que el Ministerio del Interior se había comprometido a liberar una partida presupuestaria para cubrir los anticipos vinculados a la cumbre de la ONU en Sevilla, entre otras partidas)

The Epoch Times: ¿Qué consecuencias puede tener esta situación si no se resuelve pronto, tanto para los agentes como para el funcionamiento operativo de la Policía Nacional?

Sra. Pajarón: Si no se aporta una solución urgente a esta situación, podría verse comprometida la operatividad y seguridad de los distintos dispositivos al no poder garantizarse la presencia suficiente de funcionarios policiales. La Dirección General de la Policía no puede exigir a los agentes que asuman con recursos propios los gastos derivados de desplazamientos por motivos de servicio.

Los policías, como cualquier otro ciudadano, tenemos responsabilidades personales y económicas: facturas, alimentación, hipotecas… y, sobre todo, el deber de velar por el bienestar de nuestras familias. Nada debe situarse por encima del derecho de nuestros hijos a una vida digna y estable.

Las opiniones expresadas en este artículo son propias del autor y no necesariamente reflejan las opiniones de The Epoch Times

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