El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, lanzó este jueves una acusación de alto calibre contra el régimen de China, al denunciar que Pekín estaría utilizando a Venezuela como ruta de tránsito para el tráfico de fentanilo hacia territorio estadounidense, con el objetivo de evadir los controles aduanales y portuarios de Estados Unidos y México.
Desde la Casa Blanca, Trump aseguró que el régimen chino obtiene hasta 100 000 millones de dólares anuales mediante el comercio ilícito de esta droga sintética, responsable de cientos de miles de muertes en el país norteamericano.
«China está traficando fentanilo a través de Venezuela para evitar los puertos de Estados Unidos y México. Hablaré de esto directamente con Xi», afirmó el mandatario durante una rueda de prensa.
El anuncio reconfigura el mapa geopolítico del narcotráfico y coloca a Venezuela como un eslabón central en una red transnacional que uniría intereses de Pekín, Caracas y grupos criminales regionales en una operación de escala continental.
La nueva fase de la guerra contra el narcotráfico
Trump informó que la estrategia de su gobierno contra el narcotráfico se encuentra en una «nueva fase operacional», que pasará de los operativos marítimos a acciones terrestres dirigidas directamente contra las organizaciones criminales.
«La tierra será lo siguiente. Los cárteles están librando una guerra contra Estados Unidos, y nosotros les estamos respondiendo como nunca antes», enfatizó.
Lea también: Una película sobre el tráfico ilícito de órganos en China genera preocupación en el público de Washington D. C.
Según datos ofrecidos por el mandatario, más de 120 000 presuntos delincuentes han sido detenidos desde enero, incluyendo a más de 3000 miembros de grupos como cártel de Jalisco Nueva Generación, MS-13 y el Tren de Aragua, una organización venezolana que ha expandido sus operaciones a más de una docena de países.
Trump calificó a estos grupos como «el equivalente de ISIS en el Hemisferio Occidental», y aseguró que su administración no busca mitigar la amenaza, sino eliminarla completamente.
Operaciones «cinéticas» en aguas internacionales
El mandatario también confirmó que las fuerzas estadounidenses han ejecutado «ataques cinéticos» contra embarcaciones sospechosas en el Caribe y el Pacífico, como parte de la ofensiva marítima.
«Conocemos los barcos, las personas, y tenemos permiso para hacerlo. Es una cuestión de seguridad nacional», explicó Trump.
El presidente justificó estas acciones recordando que las drogas ilícitas han cobrado más de 300 000 vidas en Estados Unidos, y que el combate al tráfico de estupefacientes se ha convertido en un pilar central de la defensa nacional.
Venezuela y China en el punto de mira
Las acusaciones de Trump profundizan la tensión con Pekín y Caracas, dos aliados estratégicos que han intensificado su cooperación económica y militar en los últimos años.
José Hurtado, analista de Seguridad Nacional advierte que el uso de territorio venezolano como corredor logístico para el narcotráfico chino no solo tiene fines económicos, sino también estratégicos y políticos, al debilitar las capacidades internas de seguridad de Estados Unidos mediante una guerra de degradación social a través de las drogas.
Lea también: Sanidad de EE. UU. urge romper lazos con sistemas de trasplantes de órganos de China tras denuncias de abusos
«El fentanilo no es solo un negocio: es un arma de destrucción masiva silenciosa», explicó un experto. «China y Venezuela están usando el crimen organizado como herramienta de poder geopolítico».
El nuevo enfoque: narcotráfico como terrorismo
El Secretario de Defensa, Pete Hegseth, respaldó las palabras del presidente y reiteró que la lucha contra los cárteles será total.
«A estas organizaciones terroristas extranjeras las trataremos como a Al Qaeda. Te encontraremos, mapearemos tus redes, te cazaremos y te mataremos», sentenció.
La Casa Blanca considera ahora que las redes del narcotráfico deben ser clasificadas como organizaciones terroristas extranjeras, un cambio conceptual que permite acciones militares directas y operaciones internacionales sin necesidad de autorización previa del Congreso.
El desafío hemisférico
Mientras el régimen de Nicolás Maduro guarda silencio ante las acusaciones, el anuncio de Trump reabre un debate sobre el papel de Venezuela como santuario del crimen organizado transnacional.
El país caribeño se ha convertido en un punto de convergencia para mafias del oro, redes de lavado de dinero, células del narcotráfico y grupos armados irregulares, muchos de ellos con respaldo o tolerancia del Estado venezolano.
De confirmarse las denuncias, China estaría utilizando ese mismo ecosistema criminal para introducir fentanilo a Estados Unidos, desafiando la soberanía y seguridad del país norteamericano.
Con esta acusación, Trump coloca a China y Venezuela en el epicentro de la crisis más letal de drogas en la historia moderna de Estados Unidos.
Si las pruebas se confirman, el asunto podría escalar a un caso de agresión encubierta por parte de un Estado extranjero a través de medios no convencionales.
Pero si se trata de una maniobra política, la advertencia sigue siendo válida: el fentanilo se ha convertido en el arma perfecta para debilitar a una nación desde adentro.
«Estamos recuperando el control a niveles sin precedentes», concluyó Trump.
«Y quienes estén detrás de esta guerra química contra nuestro pueblo… serán perseguidos».
Las opiniones expresadas en este artículo son propias del autor y no necesariamente reflejan las opiniones de The Epoch Times
Cómo puede usted ayudarnos a seguir informando
¿Por qué necesitamos su ayuda para financiar nuestra cobertura informativa en España y en todo el mundo? Porque somos una organización de noticias independiente, libre de la influencia de cualquier gobierno, corporación o partido político. Desde el día que empezamos, hemos enfrentado presiones para silenciarnos, sobre todo del Partido Comunista Chino. Pero no nos doblegaremos. Dependemos de su generosa contribución para seguir ejerciendo un periodismo tradicional. Juntos, podemos seguir difundiendo la verdad.