SALUD Y BIENESTAR

¿Conoces el ASMR?: te explicamos la ciencia detrás de este fenómeno viral

¿Alguna vez has experimentado una corriente eléctrica que comienza por la cabeza y baja por todo el cuerpo? Si la respuesta es sí, te explicamos en qué consiste este fenómeno. Si la respuesta es no, ¡buenas noticias!: hay formas de provocar esta sensación tan placentera
diciembre 17, 2025 19:40, Last Updated: diciembre 17, 2025 20:06
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Si navegas frecuentemente por YouTube y redes sociales, seguramente te habrás topado con las siglas ASMR en innumerables videos. Pero, ¿sabes realmente qué significan estas cuatro letras? Y más importante aún, ¿hay algo científico detrás de este fenómeno que ha conquistado Internet, o se trata simplemente de otra moda viral más?

Imagina estar escuchando un susurro suave cerca de tu oído, o el sonido delicado de alguien pasando las páginas de un libro. De repente, sientes un cosquilleo placentero que comienza en tu cuero cabelludo y desciende suavemente por tu nuca. No estás imaginando cosas: has experimentado el ASMR, un fenómeno que millones de personas buscan deliberadamente para relajarse y que la ciencia apenas está comenzando a comprender.

La Respuesta Sensorial Meridiana Autónoma, conocida mundialmente como ASMR por sus siglas en inglés Autonomous Sensory Meridian Response, es esa sensación tan particular que algunos describen como «burbujas de champán en el cerebro» o una «corriente eléctrica suave» recorriendo el cuerpo. Aunque suene extraño, no tiene nada que ver con la excitación sexual, a pesar de que algunas personas lo han llamado informalmente «orgasmo cerebral». En realidad, se trata de una profunda sensación de calma y bienestar que parece tener raíces en nuestra evolución como seres sociales.

Un fenómeno tan personal como único

Lo fascinante del ASMR es que no todos pueden experimentarlo. Para algunas personas, ciertos sonidos o imágenes desencadenan esa ola de relajación instantánea, mientras que para otras, esos mismos estímulos no generan absolutamente nada. Es como tener un superpoder secreto que solo algunos poseen, y los científicos todavía están tratando de descifrar por qué.

Los desencadenantes son sorprendentemente cotidianos. Para el 75 % de quienes experimentan ASMR, los susurros funcionan como magia. Otros responden al sonido del agua vertiéndose en un vaso, al crujido suave del papel, al cepillado del cabello, o incluso al ver a alguien realizar tareas meticulosas como doblar ropa o preparar comida con movimientos lentos y deliberados. Hay algo hipnótico en la atención dedicada a pequeños detalles que nuestro cerebro parece apreciar profundamente.

Curiosamente, muchas personas reportan sentir ASMR en situaciones de cuidado personal: cuando alguien les corta el cabello, durante un masaje, o incluso en una revisión médica rutinaria. Esta conexión con el cuidado interpersonal ha llevado a los investigadores a teorizar que el ASMR podría estar relacionado con el acicalamiento social que observamos en los primates, ese comportamiento ancestral que fortalece vínculos y genera sensaciones placenteras.

¿Qué dice la ciencia?

Cuando los científicos observan el cerebro de alguien experimentando ASMR mediante resonancia magnética funcional, descubren algo intrigante: se iluminan las mismas regiones asociadas con el placer, la vinculación social y el tacto. El núcleo accumbens, esa parte del cerebro relacionada con la recompensa y la dopamina, se activa intensamente. También lo hace la corteza prefrontal, que está vinculada con comportamientos sociales, y áreas que procesan sensaciones táctiles, a pesar de que nadie está tocando físicamente a la persona.


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Es como si el cerebro interpretara ciertos sonidos e imágenes como una forma de contacto reconfortante. David Huron, profesor de la Universidad Estatal de Ohio, lo explica así: el ASMR está claramente relacionado con la percepción de atención no amenazadora y altruista, similar al enorme placer que obtienen los primates cuando son aseados por un compañero, no para estar limpios, sino para establecer lazos afectivos.

Steven Novella, director de Neurología de Yale, compara el ASMR con las migrañas: ambos son reales porque muchas personas diferentes reportan los mismos síntomas, incluso si aún no entendemos completamente sus mecanismos. Tom Stafford, psicólogo de la Universidad de Sheffield, señala que el ASMR podría seguir el mismo camino que la sinestesia, ese fenómeno en el que las personas «ven sonidos» o «saborean palabras», que durante años fue considerado un mito hasta que la ciencia encontró formas de medirlo en los años noventa.

El placentero «hormigueo cerebral»

Todo comenzó en 2007, cuando una joven de 21 años publicó en un foro de salud preguntando si alguien más experimentaba esa sensación extraña y placentera que sentía desde niña. Las respuestas fueron abrumadoras: cientos de personas habían sentido exactamente lo mismo, pero nunca habían sabido cómo llamarlo. 

Tres años después, Jennifer Allen acuñó el término «Respuesta Sensorial Meridiana Autónoma», eligiendo palabras que sonaran objetivas y clínicas en lugar de las denominaciones coloquiales que circulaban.

Desde entonces, el fenómeno ha explotado. Millones de vídeos ASMR pueblan plataformas como YouTube, donde creadores especializados, conocidos como «ASMRtistas», dedican horas a producir contenido diseñado específicamente para desencadenar esa respuesta. Muchos utilizan técnicas de grabación binaural, que emplean dos micrófonos separados que imitan la distancia entre nuestros oídos, creando una experiencia tridimensional que hace sentir al oyente como si estuviera realmente presente en la escena.

Pero más allá de ser una tendencia de internet, el ASMR está captando la atención seria de la comunidad médica. Estudios con cientos de participantes han revelado que las personas que consumen contenido ASMR reportan mejoras significativas en síntomas de ansiedad, insomnio y dolor crónico. Muchos lo utilizan como una herramienta para conciliar el sueño, aprovechando su capacidad natural para inducir estados profundos de relajación sin necesidad de medicamentos.

De fenómeno viral a herramienta terapéutica

Los investigadores de la Universidad de Swansea encontraron que el ASMR podría funcionar como una medida terapéutica complementaria similar a la meditación o las técnicas de atención plena. La diferencia es que el ASMR parece ser más accesible para algunas personas que no están habituadas a emplear prácticas meditativas tradicionales, ya que no requiere esfuerzo consciente: simplemente sucede cuando encuentras tu desencadenante perfecto.

Aunque queda mucho por descubrir, el ASMR representa algo más que una moda pasajera de internet. Es una ventana fascinante hacia cómo nuestro cerebro busca consuelo, conexión y calma en medio del caos moderno. 

En un mundo donde el estrés y la ansiedad son epidémicos, tener acceso a una herramienta gratuita, sin efectos secundarios y potencialmente poderosa para promover el bienestar mental es algo que vale la pena explorar.



El Prof. Liu Zheng es un activo investigador y divulgador de la Medicina Tradicional China, director de la prestigiosa Clínica de Medicina Integrativa y Acupuntura MEDIZEN (Madrid) y docente principal de programas de postgrado de Acupuntura en diversas instituciones académicas de Ciencias de la Salud. 

Es director y docente titular de Campus Acupuntura, centro de estudio e investigación de Acupuntura. Actualmente, ostenta el cargo de presidente de la Asociación de Acupuntores Sanitarios 

Es además, autor de varios libros de gran éxito sobre la Medicina Tradicional China y Acupuntura.

Contacto: liu@clinicamedizen.es

Instagram: @Prof. Liu Zheng – Medicina China

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